La Barcelona medieval en tiempos de la construcción del templo de Santa María del Mar conforma el escenario de esta soberbia recreación histórica repleta de intriga, violencia y pasión, en un tiempo convulsionado por las rebeliones contra las injusticias y feudales, el antijudaísmo, los conflictos dinásticos y la férrea represión inquisitorial. La edificación de la iglesia y la devoción por la Virgen marinera se erigiran en símbolos del tortuoso camino que el joven protagonista emprenderá en pos de su libertad.